'World of Shadows' - En el mundo de las sombras

Justo J. Sánchez*

Separan las paredes, definen espacios. Funcionan también –paradójicamente- como fuentes de información y vehículos de comunicación. Las fotos intervenidas de Raciel Gómez Golpe hacen arqueología y labor detectivesca en La Habana, città chiusa a pesar de su aparente desenfado y apertura. Investiga bajo los parámetros establecidos en sus muestras “Puzzle” y “Erosión del Límite”.

El grafito en el mundo romano no era necesariamente subversivo ni se ceñía a los muros externos de las estructuras. Se utilizaba de hecho también por las clases patricias en un contexto doméstico. Era así mismo una actividad interactiva. Las paredes, por ende, ofrecen información sobre su historia, arquitectura, esquemas de división y uso de materiales y superficies. Los rastros gráficos nos permiten escudriñar un récord de los participantes en una comunicación escrita .

La erosión de los años, el descuido y abandono van mostrando facetas que nos llevan a ser testigos de la historia callejera que las paredes fusionan con interiores depauperados. Examinamos documentos a partir de las prioridades estéticas de Gómez Golpe: el aislamiento, la pobreza y la precariedad. Cuando toda separación se ha colapsado, las fachadas habaneras se han convertido en mesas de trabajo para el estudio antropológico. Allí podemos reconstruir un diario citadino con las listas de la charada, candados para reforzar una privacidad inútil, cemento, capas de pintura, papeles adheridos, planchas de metal, madera apuntillada, nombres propios pintados con tiza o grabados con piedra. Según el artista: “Parto del criterio que el ser humano incide en su contexto al expresar de modo voluntario o involuntario su mundo interior. Con esta exposición profundizo … mis indagaciones sobre la existencia humana desde un punto de vista antropológico y social”.

Los nombres conviven con lo que parecen funciones matemáticas. No son más que los resultados de la lotería. La ciudad por la que transitamos con Gómez Golpe es un parapeto en ruinas. Pasamos por muros (kotel) donde la presencia humana se siente como una sombra por los vestigios del pasado. En esta triste historia el tiempo parece detenido. El espectador deambula solitario por parajes habitados por huellas y trazos. La vitalidad ha sido desplazada. Quedan los nombres de los que se fueron y los números de las fuerzas del azar.

*Justo J. Sánchez, galardonado periodista cultural, mantiene un perfil como comentarista cultural en la televisión hispana estadounidense. Conferencista en importantes ferias culturales como Art Palm Beach, Sánchez ha escrito en el catálogo de Sotheby’s y en publicaciones como Art Nexus, The Miami Herald, El Listín Diario. Ha sido entrevistado en la RAI, CBC, NBC Nightly News, The New York Times y The Wall Street Journal